OAN Staff James Meyers
Jueves, 10 de abril de 2025
Por segunda vez, los republicanos de la Cámara de Representantes aprobaron un proyecto de ley que exigirá a los votantes presentar un comprobante de ciudadanía para votar en las elecciones federales. El intento anterior fue bloqueado por el Senado, entonces dominado por los demócratas.
El proyecto de ley, titulado Ley para la Protección de la Elegibilidad del Votante Estadounidense (SAVE, por sus siglas en inglés), se aprobó con 220 votos a favor y 208 en contra.
Su objetivo es impedir que los no sean ciudadanos voten.
La votación incluyó a cuatro representantes demócratas que se alinearon con los republicanos: los representantes Ed Case de Hawái, Henry Cuellar de Texas, Jared Golden de Maine y Marie Gluesenkamp Pérez de Washington.
El proyecto de ley exige que los solicitantes presenten documentación que acredite su ciudadanía estadounidense, como un pasaporte válido, un acta de nacimiento u otras formas de identificación que acrediten su ciudadanía estadounidense.
El legislador Chip Roy (republicano por Texas), quien presentó el proyecto de ley, declaró el jueves: “No existe controversia en afirmar que se debería poder garantizar que solo los ciudadanos voten”.
“No hay nada más sagrado bajo la Constitución que garantizar que el pueblo tenga voz en las elecciones de quienes lo representan en Washington y en todo el país”, declaró Roy.
“Una vez que esto se socava, la gente pierde la confianza en las mismas instituciones sobre las que se basa. Esta legislación está diseñada para restaurar esa fe, para salvar nuestras elecciones, para preservar la integridad electoral”.
Mientras tanto, los demócratas han intentado argumentar que el proyecto de ley dificultará el voto de los estadounidenses.
El representante Joseph Morelle (demócrata por Nueva York) afirmó que es especialmente improbable que las personas mayores cuenten con los documentos requeridos, y que “ni siquiera una identificación militar” se consideraría documentación aceptable bajo la ley.
“Los republicanos obligarían a los estadounidenses a una pesadilla de papeleo, enterrando el registro de votantes bajo una montaña de burocracia y trámites”, declaró Morelle.
“Con la Ley SAVE, la mayoría de los estadounidenses no podrían registrarse para votar con su identificación real. Además, con la Ley SAVE, casi 70 millones de mujeres estadounidenses no podrán registrarse para votar con su certificado de nacimiento simplemente porque cambiaron su nombre al casarse”, añadió el legislador demócrata.
“Y la Ley SAVE también tendrá un alto costo financiero para los ciudadanos estadounidenses, porque, sí, la Ley SAVE permite a los estadounidenses usar sus pasaportes para registrarse para votar. Pero la mitad de los estadounidenses no tienen pasaporte, y un pasaporte cuesta $130 dólares”.
El año pasado, los republicanos presentaron el proyecto de ley por primera vez, y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (republicano por Luisiana), dijo que si bien demostrar que los inmigrantes ilegales votan en las elecciones estadounidenses es una tarea que lleva mucho tiempo y es difícil, es algo que ambos partidos saben “intuitivamente” que está sucediendo.
Además, en muchos estados gobernados por demócratas, como California, generalmente no se requiere identificación para votar.
“Todos sabemos, intuitivamente, que muchos indocumentados votan en las elecciones federales. Pero no ha sido algo fácil de demostrar. No tenemos esa cifra. Esta legislación nos permitirá hacer precisamente eso; evitará que suceda. Y si alguien intenta hacerlo, ahora será ilegal dentro de los estados”, declaró Johnson en mayo pasado.
Tras haber sido bloqueado previamente por el Senado, controlado por los demócratas, el proyecto de ley podría tener una nueva oportunidad para su aprobación en esta ocasión.
El proyecto de ley debería tener una acogida más favorable entre la mayoría republicana, especialmente porque ha sido impulsado por el presidente Donald Trump. Sin embargo, es probable que aún tenga que superar obstrucción por parte de los demócratas.
Esta nota fue traducida al español por Eduardo Flores de una versión en inglés.
